LOS CINCO SENTIDOS EN LA MESA
Los olores y sabores de la tierra y los colores de la vida integran un paisaje gastronómico rico en elementos y en imaginación. La cocina morellana ha evolucionado en la fusión de la sabiduría tradicional y la vanguardia culinaria. Innovación, investigación y dedicación componen este mapa de los sentidos que es la cocina moderna morellana. Una cocina de temporada que profundiza en la riqueza de productos que ofrece la tierra en las cuatro estaciones del año.
Gozar con un flaón desconstruido, o un helado de flaón, helado de setas, escuchar los sonidos de un crujiente de trufa y paté, o visualizar el hielo en un crujiente de aguardiente de hierbas. Milhojas de paté y cecina, arroz meloso con morcilla, macarrones con huevo frito trufado y crujiente de jamón de Teruel. Manitas de cerdo laminadas al aroma de trufa, croquetas de setas, de trufa, de alcachofas, de queso de Morella, de morcilla, de espinacas. Ensaladas de perdiz en escabeche, mermeladas de tomate y violetas, carnes confitadas, envueltas en hojaldres, escondidas en pasta crujiente. Fideuà de setas con virutas de foie y ajos tiernos, espuma de patatas de la tierra para acompañar el pulpo, bacalao a la espuma del pil pil. Ciervo con salsa de mostaza antigua,
medallones de ternera al vino, rissoto de trufa. Ensalada de judías verdes con setas, carpaccios de ternera lechal, de cecina. Trufa laminada sobre champiñones crudos y aceite de oliva, bizcocho de setas. Costillas de cabritillo rebozadas, sorbete de trufa…
Los restaurantes morellanos han experimentado y logrado una armonía digna de la alta cocina. Los mismos ingredientes pero con nuevas técnicas y tecnologías, un trabajo de restauración que está cosechando merecidos reconocimientos y que ofrece al visitante, además de la buena mesa, unos locales con encanto. Otra de las iniciativas que se han ido consolidando es la celebración en los restaurantes de Jornadas Gastronómicas como las que se realizan en el otoño, con la temporadas de setas y caza, o en invierno con la trufa.
En esta evolución gastronómica, Morella también ofrece la posibilidad de ir de tapas por los diferentes establecimientos, sobre todo los bares y tabernas. Además de celebrar entre junio y julio la campaña «Vamos de Tapas» (Anem de tapes), durante todo el año se pueden degustar productos típicos y platos elaborados en forma de raciones o tapas.